Es una herramienta terapéutica sencilla y eficaz para tratar diversidad de problemas personales, familiares, laborales y de salud.
Algunos dicen que este trabajo desafía cualquier descripción y debe ser experimentado. Otros dicen que va más allá de la terapia. Los terapeutas están sorprendidos por la eficacia de este método, que, de una forma muy rápida y clara, saca a la luz la causa del sufrimiento que la persona plantea.
Los participantes se van con una comprensión de sí mismos, del poder del amor y de las fuerzas que gobiernan las relaciones humanas, que les cambian la vida. Por eso cada vez más psicólogos, psiquiatras, psicoanalistas, médicos, enfermeras, educadores, terapeutas, asistentes sociales, abogados, empresarios… se interesan por las constelaciones familiares.
Las Nuevas Constelaciones Familiares son mucho más que una herramienta terapéutica, nos pone en contacto con los movimientos más profundos de nuestra alma o ser y nos revela el amor que está en la fuente de nuestra vida. La exploración de las dinámicas que perduran en nuestro sistema de familia tiene un efecto poderoso de sanación y reconciliación, tanto a nivel físico como espiritual.